Irizar e-mobility desarrolla un proyecto de segunda vida de baterías eléctricas junto con EMT Madrid e Iberdrola

• Irizar e-mobility es un partner estratégico dentro de las soluciones de descarbonización.
• Este proyecto viene a dar respuesta al fin de la primera vida de las baterías, extendiendo su vida útil en otras aplicaciones y remarcando así su compromiso con el medio ambiente.
• El proyecto piloto, ubicado en el centro de operaciones de EMT en Fuencarral, tiene como objetivo la integración de un sistema de almacenamiento para la optimización del consumo de la cochera.

Irizar e-mobility, EMT Madrid e Iberdrola están desarrollando un proyecto de reutilización de baterías eléctricas en el centro de operaciones de EMT en Fuencarral. En este emplazamiento se ha instalado un sistema para el almacenamiento estático de energía eléctrica de carácter estacionario en el que se integran baterías que han llegado al final de su primera vida.

Irizar e-mobility lleva más de siete años diseñando y fabricando sus propias baterías, que integran todos sus autobuses eléctricos. Para la compañía la reutilización y la segunda vida de baterías siempre ha sido una prioridad, y por ello colabora con distintas entidades para impulsar y promover la economía circular en este ámbito.  

Las baterías son un componente esencial de los autobuses eléctricos, puesto que almacenan la energía eléctrica que necesita el motor para mover el vehículo y, por tanto, la autonomía de este depende, en gran medida, de la capacidad que dispone la batería en cada momento. Las baterías someten a ciclos de recarga diarios, lo que va mermando poco a poco su capacidad de almacenamiento para su uso como batería de tracción. Esta conjunción de elementos obliga, en función del grado de degradación, a sustituirlas para garantizar niveles óptimos en la operación del autobús.

En este proyecto, se ha apostado por el uso de baterías en segunda vida, como respaldo para la recarga de los autobuses de la EMT, con el objetivo de que estas puedan ser utilizadas, como elemento integrado en su sistema de smartcharging, para poder reducir los picos de potencia y de demanda en las horas habituales de carga de baterías, optimizando el proceso de recarga y reduciendo los costes asociados al mismo. El contenedor, que se recarga en los periodos valle con el objetivo de optimizar los precios asociados a la energía, reduciendo de esta manera el coste energético y aumentando el uso de energía verde, dispone de una energía y potencia máxima de almacenamiento de 1MWh y de 500 kW de carga y descarga respectivamente y se compone de quince racks de baterías, retiradas de 3 vehículos de la marca Irizar e-mobility. Además, el contenedor puede ser gestionado a través del sistema de smartcharging de EMT, operativo para la recarga diaria de la flota de autobuses eléctricos de la empresa municipal en el centro de operaciones de Fuencarral.

El proyecto, asimismo, además de ofrecer una solución práctica y económica a la carga de baterías, contribuye significativamente a la sostenibilidad ambiental y a la economía circular: extender la vida útil de las baterías supone reducir la necesidad de fabricar nuevas, disminuyendo así el uso de determinadas materias primas y obteniendo así la consiguiente reducción de su impacto ambiental y social. Todo ello favorece la consolidación de un transporte público más limpio, eficiente y responsable.

Este proyecto se ha desarrollado en el marco del programa PERTE VEC (CAPITAL).